Otra de las chirigotas del Selu, la de los pesaos y el probe Juan. Y una de las críticas más certeras que se han escuchado últimamente al batiburrillo sofista, chapucero y corrupto en que se ha convertido la política en nuestros tiempos.
Con un humor, por supuesto, absolutamente descacharrante. Merece la pena escucharlo, reír y reflexionar.
Letra.
Ahora que me has sacao tú el tema, Juan,
de lo corta que se te ha hecho a ti lo de la campaña electoral,
los debates, los pactos...
¡Pa cortarse las venas con el cristal de una urna, Juan!
Han querío vendernos que era diferente,
pero pa mí es la historia de siempre,
el candidato sale a la calle,
se va pa uno con cara de tonto,
lo engancha asín, bla, bla, bla, bla, bla...
¿tú me entiendes lo que yo te quiero decir?
y le habla con una monotonía, una monotonía,
¡que no hay quien lo aguante!
Siempre habla él solo, y no te respeta.
Es que, por convencerte, hasta te aprieta,
es que llega hasta a cogerte por la chaqueta,
es que tú estás asín, aguantando al tío,
no puedes más, el cuello torcío...
¡pero eso qué le importa al que es puñeta!
¡Joé, que es que te habla tan al oído, tan al oído,
que es que te deja toa la oreja más colorá que una piruleta!
Un político va solamente a hablar con la gente
cuando le interesa.
Sus palabras golpean tu cerebro, y te acaba doliendo
hasta la cabeza.
Yo sé, Juan, que tú tienes hasta un límite de paciencia
si alguien te viene a molestar, sí, sí, sí, sí...
Que tú le echarías cojones a un gachó
que a ti te quisiera manipular, sí, sí, sí, sí...
Es que tú eres capaz de darle una trompá...
¿Qué dices, Juan?
¿Que yo con la palabra que tengo
podría meterme a político y forrarme en dos días?
Ahora ya hablado en serio,
yo para la política voy a dar el salto,
contigo voy a empezar una ronda de contactos,
es el día exacto,
vi a tener tacto,
a ti me adapto...
vamo a meternos en un bar,
que te voy a explicar
el programa electoral...
¡Ya termino, Juan!
Y con cuatro cervezas hacemos un pacto.
¡Tú paga el pa(c)to!